Erase una vez, en el reino de
PorteñoLandia…
Después de charlas de peluquerías, entre
amigas/mujeres/gays con té, daiquiris, caipirinhas, mojitos o vinos espumantes
de por medio… Por primera vez me encuentro en una encrucijada.
Lo digo…. …. …. no lo digo…. …. ¿? SUS-PEN-SO
Un frío recorre mis dedos mortalmente
INIMPUTABLES… SI,
SE HABLA ¡! La Inimputable, te escucha, toma tus
palabras lo pone en al licuadora mental y SIRVE éste POST ¡!
El tamaño importa ¿? Es un mito, es una
utopía, es UNA realidad ¿?... La mayoría de las veces, esta todo bien, lo
estándar es lo más aplicable para estos meetings. Lo exuberante es solo
momentos de antojos y vicios, aunque sinceramente cuando es muy exuberante, la
realidad indica que nos da miedo... Creemos que no va a entrar, que nos va a doler, que nos va a acalambrar y que
nada, nada volverá a ser igual, lo que era una flor delicada puede llegar a
parecer un girasol del campo… (Son SOLO MITOS, siempre vuelve a ser la flor
delicada)
Ahora, la diminutez… No hay forma ni
definición mental. Primero, la sorpresa de no llegar a distinguirla, la fuerza
mental para que tu rostro no delate el asombro y el pensamiento que machaca
cual pajarito a 1000RPM para que EL no se de cuenta. Pero EL ya sabe que
llego sin mucho para ofrecer. Entonces UNA se calza la voluntad, y la aplica,
se pone una banda de “Gauchita-Anónima” y aplica más voluntad, se suman todos
los sentidos para hacerlo sentir poderoso… El tacto, el gusto con todas las papilas
gustativas, el oído a través de los sonidos aberrantes con los que una sabe
endulzar a través de una respiración agitada y tu cabeza te OVACIONA al ritmo de DALE VOS
PODES, como en el GYM.
Llego el fin de tanta voluntad, de tanta energía puesta
para un momento mínimo y paradójicamente todo es mínimo, EL te dice que es la
primera vez que le pasa. Y tu cabeza busca desesperadamente a Steven Spielberg, porque lo que VOS/UNA hizo,
es digno de un “OSCAR” queres que STEVEN te dirija ¡!
Entonces, un beso con sabor a sueño, y te
vas porque tenes una reunión a primera hora (Spielberg aún no dijo: CUT) pero
poco te importa.
Chau… Hablamos¡! Y los taquitos de 10 cm no
dan abasto para correr, huir de ahí. Pero por más que huyas, siempre el
recuerdo acechará tu mente y siempre la anécdota será contada al resto de la
comunidad femenina. Sin nombres, sin detalles personales solo un testimonio
conmovedor.
Señores pasajeros, señores compañeros… Acá,
en nuestra nave preferida, estas cosas no suceden por más que la fantasía
masculina INSISTA… Lamento pincharles el globo, lamento bajar el nivel de
fantasía sexual que tienen con la profesión de los/las tripulantes… Lo lamento
profundamente, pero así y todo:
Espero hayan disfrutado
del vuelo y esperamos saludarlos nuevamente abordo…
En nombre de Lulú, Terciopelo y Velvet, sus
aeromozas los saludamos y les deseamos dulces sueños ...