Oh Sí, sí… Un día cualquiera de un resfrío
importante. Y como quien no quiere la cosa, otra vez mis cuerdas vocales, me
abandonaron… Esta vez la voz me abandonó como novio despechado. Junte fuerzas…
Y voy al médico, llevando la voz en una cajita… Triste, meditabunda y muda. La
receta: un divinor, corticoide intramuscular… CHAN ¡! Tengo que inyectarme y
seguido de eso se vino un rosario de maldiciones y las lágrimas atentas y mudas, oDbvio*.
Al otro día después de esperar al médico de
la empresa para que vea mi estado calamitoso y me dijera que no podía volar, me
dirigí como ganado al matadero, con una sensación de cuerpo mal traído por el
resfrío, el temblor de las rodillas por el cagaso y la carga de que es la única
alternativa si quiero/busco sentirme mejor.
Llego a la farmacia recomendada. La
enfermera no estaba (una situación cada vez era más tensa) y caminé rumbo a
otras dos farmacias en busca del medicamento y alguien femenino que me aplique en
mi bien ponderado pomponcito… Una mezcla de emoción de felicidad y angustia,
cuando encontré el lugar… Los nervios en forma de sudor frío, las lágrimas
queriendo desbordar, la risa nerviosa, caminaba como futuro padre en sanatorio.
Me sentía como vaca al matadero… Y sé que exagero, pero no lo puedo evitar !!… Era
una simple inyección. El temor al desmayo, la inexperiencia y volver caminando
casi cojeando… Me hago cargo, SI ¡! Al final, la enfermera divina, no me dolió,
no me desmayé y caminé de vuelta sin que nadie notara absolutamente nada.
En vuelo, en el avión… Si hay inyección,
hay médico y hay gravedad… Cualquier persona que denote cierto malestar previo
al vuelo, haga un STOP mental, hágase revisar o llamamos al médico del aeropuerto
al avión, se lo revisa bien (y si no esta apto) arbitrariamente… Abajo, hasta
el próximo vuelo, y hasta SU mejoría… No es mala onda, es que todo malestar se
potencia con la presurización y la altura… Y con los ojos cerrados, denos
crédito por lo que decimos… Pasado mañana lo mimamos con un jugo doble on the
rocks ¡!
* oDbvio está mal escrito apropósito.